Introducción
Cambiar de Windows a Linux es una decisión que muchos usuarios siguen considerando, ya que Linux ofrece una experiencia de usuario muy personalizable, actualizaciones más rápidas y menor vulnerabilidad frente a malware y virus. Si estás pensando en hacer el cambio, esta guía práctica te mostrará cómo hacerlo en pocos pasos.
Elige la distribución que mejor se adapte a tí
El primer paso para cambiar de Windows a Linux es elegir una distribución. Hay muchas distribuciones disponibles, cada una con sus propias características y beneficios. Algunas de las más populares incluyen:
- Ubuntu: una distribución amigable para principiantes, con una gran comunidad y soporte.
- Fedora: centrada en la innovación y la integración de las últimas tecnologías.
- Debian: conocida por su estabilidad y su amplia selección de paquetes.
- Linux Mint: una distribución fácil de usar, basada en Ubuntu, con un enfoque en la simplicidad, y a nuestro parecer, la más similar a Windows en cuanto a interfaz.
Investiga las diferentes distribuciones y elige la que mejor se adapte a tus necesidades y preferencias.
Descarga la ISO de la distribución
Una vez tenemos elegida la distribución que queremos usar, por ejemplo Linux Mint, tendremos que ir a su página oficial, y descargar su imagen ISO. Por ejemplo, en este caso, deberíamos de dirigirnos a la página oficial de descargas de Linux Mint y descargar la versión Cinnamon o la que prefieras.
Crear un medio de instalación
Estos pasos se detallan en el tutorial de instalación general, pero en pocas palabras, tendremos que crear una memoria USB o DVD con la ISO que hemos descargado. Esto podemos hacerlo desde una herramienta como Rufus o balenaEtcher las cuales permiten crear el medio de instalación desde Windows de forma sencilla.
Realizar una copia de seguridad
Antes de instalar cualquier distribución de Linux, es fundamental realizar una copia de seguridad de tus datos importantes, como documentos, imágenes y archivos de configuración. Puedes usar una unidad externa, un servicio en la nube o el método que prefieras para asegurarte de no perder nada.
Configurar la BIOS para arrancar desde el medio de instalación
Para poder instalar Linux, es necesario arrancar desde la BIOS (generalmente presionando teclas como F2, F10 o SUPR al inicio). Asegúrate de habilitar la opción de inicio desde USB o DVD y colócala como la primera en el orden de arranque.
Iniciar el proceso de instalación
A partir de este paso, el proceso es mucho más sencillo. Podemos usar este video tutorial de ejemplo para tenerlo más claro. Al principio tendremos que ingresar datos básicos sobre el idioma, distribución de teclado o zona horaria.
Particionamiento del disco
Dependiendo de si deseas instalar Linux junto a Windows u otro sistema operativo, o reemplazar completamente a Windows, tendrás que gestionar las particiones del disco. La mayoría de distribuciones incluyen una herramienta para particionar y facilitar este paso. Podemos usar el tutorial sobre cómo instalar Linux Mint en una partición separada para mayor claridad.
Configurar el sistema
Una vez hemos seleccionado dónde instalar el sistema y la información básica, se pedirá introducir otros datos básicos como el idioma, nombre de la cuenta y contraseña, ubicación para terminar. Una vez instalado el sistema, tendremos que quitar el medio de instalación de nuestro dispositivo y reiniciar para acceder a nuestro nuevo sistema operativo.
Configuración y personalización
Una vez arrancamos desde Linux, ya podemos empezar a usarlo. Como veremos, todo es muy sencillo. Si por ejemplo estamos usando Ubuntu o Linux Mint, veremos que Firefox, LibreOffice y una gran cantidad de software libre está instalado por defecto. Para personalizar e instalar controladores adicionales, podemos ver el tutorial sobre qué hacer después de instalar Linux.
Conclusión
Cambiar de Windows a Linux puede ser un proceso sencillo y gratificante si sigues los pasos descritos en esta guía. No olvides explorar las posibilidades de personalización y familiarizarte con la terminal para aprovechar al máximo tu nuevo sistema operativo. ¡Disfruta de tu transición a Linux!